Estrellas y Borrascas

Las gotas frías también son para el invierno

En invierno también hay gotas frías. Los embolsamientos de aire frío en las capas altas de la atmósfera, conocidos coloquialmente como gotas frías y más técnicamente con el concepto actualizado de depresión aislada en niveles altos (DANA), suelen tener mayor eco popular durante los episodios de lluvias torrenciales de otoño en las comunidades mediterráneas de España, pero pueden aparecer en cualquier otra estación del año, incluido el invierno. El aire cálido y húmedo de origen marítimo que ha empujado una borrasca situada al sur de la Península, el embolsamiento frío en altura y el aire polar que descansaba desde hace muchos días sobre buena parte de España han dado lugar a un extraordinario temporal de precipitaciones de lluvia y nieve en la vertiente oriental peninsular, con acúmulos de precipitación que superan los 200 mm. (litros por metro cuadrado) en la Comunidad Valenciana y otras zonas. Espesores cercanos al medio metro de nieve han sorprendido a numerosos pueblos situados en el balcón orográfico que se asoma hacia el Mediterráneo, mientras las mangas marinas han hecho acto de presencia cerca de la costa y en muchos lugares el temporal ha ido acompañado de rayos y truenos, como en las tormentas de verano. Una situación que ha generado avisos de riesgo extgremo, de color rojo, en Aragón, la Comunidad Valenciana y Cataluña durante los días 28 de febrero y 1 de marzo. En enero de 2007 también hubo una gota fría invernal, que trajo nevadas acompañadas de aparato eléctrico en provincias como las de Castellón y Teruel. Es otro episodio más de este atípico invierno en España, en el que el viento ha sido el gran protagonista en una visión de conjunto. Febrero se ha despedido con el máximo rigor invernal y marzo se presenta muy movido en lo atmosférico, con temporales de lluvia en ciernes para gran parte de España