Estrellas y Borrascas

Canícula en el solar ibérico

Son los días más cálidos del año. Tradicionalmente, el periodo del 15 de julio al 15 de agosto se alcanzan en España las temperaturas más altas del verano. La canícula ha llegado al solar ibérico, y agosto se estrena en 2013 con una invasión de aire abrasador procedente del interior de África, aunque es necesario matizar que la consideración de ola de calor va más allá de una entrada de aire cálido, ya que exige cierta persistencia para que pueda considerarse como tal. En el interior de la Península Ibérica las horas centrales del día son sofocantes, en algunas ocasiones con índices de humedad relativa inferiores al 20%, mientras que en las costas mediterráneas uno de los fenómenos típicos de la canícula es el bochorno nocturno, con temperaturas que no bajan de los 20 ºC durante la madrugada, lo que en los glosarios meteorológicos se denomina "noche tropical". En el verano 2013 las tormentas han sido protagonistas destacados en amplias zonas de España, con un mes de julio en el que han estado presentes más de la mitad de los días del mes, en especial en los Pirineos y la cordillera Ibérica. Agosto irrumpe con mucho calor, aunque habrá que ver cómo se acaba comportando el mes, habitualmente más tormentoso que julio, sobre todo en su segunda quincena. Los plomizos cielos de agosto suelen traer calimas durante el día y tormentas vespertinas, con cortinas de lluvia que ensombrecen e horizonte. 2013 tiene verano, aunque habrá que ver cuánto dura. Los calores de la canícula no deben hacernos olvidar que junio, el primer mes del verano meteorológico, fue muy frío. Los años con verano corto se suelen caracterizar por una canícula intensa pero efímera, pero la estación, como tal, muestra temperaturas medias más bajas de lo habitual y el tiempo tormentoso suele ser un hecho, como sucedió en julio.